El juicio oral contra los ex trabajadores de YPF y Petroquímica Mosconi había comenzado el pasado lunes 24 de noviembre en la Cámara Criminal nº 5 de La Plata, bajo el cargo de “coacción agravada” por una protesta realizada frente a la planta de Repsol en 2003. Los trabajadores demandaban el pago de las acciones que por ley les corresponden luego de sus despidos al privatizarse la empresa, y se les siguen adeudando hasta el día de hoy.
El alegato del secretario gremial de la CTA La Plata-Ensenada y miembro de la conducción nacional de Fetera, Carlos Guanciarrosa, elegido para hablar en nombre de todos, fue muy emotivo. Habló de todo lo que vienen viviendo desde las privatizaciones, los despidos, las acciones que nunca les pagaron, las brutales detenciones que sufrieron en el marco de esta causa, algunos llevados a la fuerza en patrulleros desde sus casas frente a sus familias.
"Esto no fue gratuito", aseguró Guanciarossa. "Porque en el camino dejaron un montón de compañeros. Muchos se suicidaron, como el compañero Walter Lescano, que se arrojó a las vías del tren porque no pudo soportar semejante negación de Justicia. Y los verdaderos responsables no están sentados acá, los que estamos sentados somos las víctimas. Con el engaño del retiro voluntario, que fueron despidos encubiertos, mucha gente que soñaba con jubilarse nos encontramos con que de buenas a primeras estábamos afuera del sistema productivo. Y ya no sabemos que hacer".
Cabe recordar que por la defraudación cometida por Repsol hacia los ex trabajadores de la empresa estatal sigue cajoneada la causa penal 8568/99 por delitos de acción pública, que tiene como imputados a los ex ministros de Economía Domingo Cavallo, Roque Fernández y altos directivos de la empresa, entre otros.
