Mauro Martínez, testigo de la causa de Miguel Bru, fue fusilado por oficiales de la Comisaría del Dique en junio de 2002. Hoy a las 8.30 horas- y tras seis años de lucha por parte de su familia y de la AMB -comienza el debate en los Tribunales Penales de 8 y 57. El juicio estará a cargo de los jueces Guillermo Labombarda, Patricia de la Serna y Samuel Saraví Paz. El Fiscal de juicio será Gabriel Sagastume.
Mauro "El Beto" Martínez fue uno de los testigos en el juicio por la desaparición de Miguel Bru. Con su testimonio se pudo saber que el ex Camisario Ojeda, posteriormente condenado por el asesinato de Miguel, aprobaba las torturas en la comisaría 9° de La Plata. Desde entonces, el Beto fue perseguido por la policía de manera constante, especialmente por el oficial Ismael Gauna y el oficial Luján Enrique Martínez. En 2002 Mauro fue detenido en la comisaría de Ensenada desde donde se dio a la fuga refugiándose en una casa del barrio El Carmen. Para quienes lo hostigaban y perseguían amenazándolo de muerte, esta fue la ocasión perfecta. El 21 de junio una brigada a la cabeza de Gauna y Martínez irrumpieron en la casa donde se escondía. A partir de allí existen dos versiones, una es la de los oficiales que aseguran que Mauro salió armado a enfrentarlos. La otra versión es la de quienes vivían en la casa allanada y que sostiene que el Beto salió con las manos en alto, diciendo que no tenía armas pidiendo que no dispararan frente a los chicos. Martínez le colocó entonces las esposas con las manos en la espalda y en ese momento dio un disparo en su estómago ocasionándole la muerte. Luego los imputados habrían plantado pruebas para simular un enfrentamiento, modo de operar que se repite de manera sistemática en la mayoría de las causas por gatillo fácil que la AMB patrocina. En este caso se armó una escena con el fin de simular un enfrentamiento y posteriormente se presentó un testigo, Pedro Luque, que la próxima semana llega a este nuevo juicio habiendo sido condenado por falso testimonio en relación con este hecho.
La pruebas obtenidas pudieron dar por tierra con la hipótesis oficial, y así se ordenó la detención de ambos agentes. Luján Martínez fue detenido de inmediato. Pero el oficial Gauna se dio a la fuga. Fue capturado recién a mediados del 2007 en el barrio El Churrasco. A raíz de esta situación, las causas de ambos oficiales tramitaron de manera separada. La familia del Beto Martínez y la AMB pidieron durante muchos tiempo la unificación de estas causas y recién este año se consiguió que tramitaran juntas y el caso fue elevado con ambos oficiales como imputados por el asesinato.
Amenazan a la hermana de la víctima
A días de empezar el juicio oral por el asesinato de “El Beto Martínez”, Graciela Martínez-su hermana- recibió amenazas telefónicas que la presionaron para no declarar.
En la madrugada del viernes, Graciela Martínez- hermana de la víctima- recibió una llamada donde la voz de un hombre joven le advirtió “ojo con lo que declarás el martes”. El mismo mensaje escuchó al atender el teléfono el sábado al mediodía. A raíz de esto fue radicada una denuncia en la Fiscalía a cargo del Dr. Morán y para garantizar su seguridad se le asignará una custodia policial durante los próximos días.
