Otra modalidad de contrato es con los beneficios de las cargas sociales, con un básico de 1200 pesos.
Uno de los problemas principales es que la Empresa queda en el pueblo La Emilia, cercano a San Nicolás, y la mayoría de los trabajadores son nicoleños, por lo tanto, no hay transporte de línea con la frecuencia requerida, tardan 40 minutos de viaje, el colectivo 1,90.
La fábrica no tiene comedor, la comida se la llevan los laburantes.
La modalidad de trabajo es de 9 horas de lunes a viernes 30 minutos de descanso en todo el día.
Son frecuentes los accidentes de trabajo en la linea de montaje, con las herramientas neumáticas, ritmo de trabajo es muy acelerado, 155 segundos por puesto para ensamblar la parte que le toca a cada operario.
Conflictividad laboral y despidos.
El 31 de marzo, los 440 operarios de la planta de la ensambladora de motos Motomel habían cumplido un paro de 48 horas en demanda de un incremento salarial de alrededor del 30 por ciento.
El conflicto se inició luego de que los operarios reclamaran un incremento de los salarios básicos, para pasar de 1.200 a 1.600 pesos mensuales.
El jueves 3 de Abril, la empresa contaatacó con el cierre de la planta y el envío de 100 telegramas de despido. Algunos de los operarios despedidos fueron reincorporados, en tanto otros continuan negociando un retiro voluntario.
Un grupo de empleados montó guardia en el exterior del edificio durante toda la semana —que durante décadas ocupara la ex fábrica textil La Emilia, apelando a "la solidaridad de los pueblos emiliano y nicoleño" porque, sostienen, su lucha "es la lucha de todos".
Mientras continúa el diálogo con los despedidos, la empresa se comprometió a entregar 200 pesos como "retribución extraordinaria", hasta tanto surjan novedades con las paritarias del sector.
En la planta de Motomel se ensamblan mensualmente unas 7 mil unidades de 35 modelos diferentes de motovehículos que produce la empresa, con partes importadas de China en su gran mayoría.
Sin embargo, el libre ingreso al país de motocicletas ya armadas en el sudeste asiático —especialmente chinas— afectó la competitividad de esta firma de capitales nacionales que emplea a unos 600 trabajadores en sus plantas de La Emilia y San Luis.