La docente de San Antonio de Areco Ana Zavaloy, luchadora incansable contra el uso indiscriminado de agrotóxicos, falleció por un cáncer profundo de la fumigación ilimitada e impune.
La enfermedad se produjo por la continua exposición en su trabajo al veneno que firmas locales y multinacionales rocían en sus zonas de producción. Como ella, miles de niña, nilos y docentes queda expuestos día a día a sustancias que deteriorar su salud hasta provocar la muerte.
El Estado Nacional y Provincial son responsables.
Desde el Espacio Intersindical Salud, Trabajo y Participación de los Trabajadores hacemos un homenaje a la compañera docente, reforzando nuestro compromiso de lucha para que fumigaciones y agrotóxicos sean un tema prioritario en la agenda de condiciones y medio ambiente de trabajo.
Espacio Intersindical
Salud, Trabajo y Participación de los Trabajadores
CGT - CTA